La Ley para Lograr una Mejor Experiencia de Vida (ABLE) de 2014 permite a los estados crear programas de ahorro con ventajas fiscales para personas elegibles con discapacidades (beneficiarios designados). Los fondos de estas cuentas ABLE 529A pueden ayudar a los beneficiarios designados a pagar gastos calificados por discapacidad. Las distribuciones están exentas de impuestos si se utilizan para gastos calificados por discapacidad. Estos gastos incluyen vivienda, educación, transporte, salud, prevención y bienestar, capacitación y apoyo laboral, tecnología asistiva y servicios de apoyo personal. Las distribuciones utilizadas para gastos no calificados deben ser reportadas en el Schedule I, Other Income.